Como la comprensión mundana del karma y sus frutos aún puede ser utilizada con objetivos mundanos como el bienestar y la gratificación en esta vida, se requiere una perspectiva más profunda que alerte a las personas sobre las limitaciones y defectos sobre todas las formas de renacimiento incluso las más elevadas.
La “comprensión armoniosa supramundano” se refiere a una comprensión profunda y directa de las Cuatro Nobles Verdades, alcanzada a través de la práctica del Noble Óctuple Sendero. Este entendimiento trasciende el conocimiento intelectual y se manifiesta como una realización experiencial que conduce a la liberación del ciclo de nacimiento y muerte (samsara).
Según Bhikkhu Bodhi, el proceso comienza con una comprensión conceptual del Dhamma, especialmente de los principios del kamma (acción) y sus resultados, así como de las Cuatro Nobles Verdades. Esta comprensión inicial, denominada “comprensión armoniosa” (sammaditthi), orienta al practicante hacia intenciones y motivaciones alineadas con el camino de la renuncia, la benevolencia y la compasión, conocidas como “intención armoniosa o pensamiento amronioso” (sammasankappa).
Guiado por esta intención, el discípulo se compromete con los factores éticos del sendero: habla armoniosa, acción armoniosa y sustento armonioso. Con una base sólida en la virtud, el practicante cultiva la mente mediante el esfuerzo armonioso y la atención plena, lo que eventualmente conduce a estados profundos de meditación (jhanas). estos estados se utilizan para investigar la naturaleza de la experiencia, contemplando los fenómenos de los cinco agregados y las bases sensoriales, discerniendo en ellos las características de impermanencia, sufrimiento y ausencia de un yo permanente.
A medida que esta contemplación se profundiza, el practicante alcanza una visión penetrante que culmina en la “comprensión armoniosa supramundana”, una realización directa de las verdades últimas que libera a la mente de las ataduras del samsara. Este logro marca la entrada en el camino noble supramundano, garantizando el avance hacia la completa liberación.
Es fundamental destacar que, para Bhikkhu Bodhi, este proceso es gradual y requiere un compromiso sincero con la práctica ética, la meditación y el desarrollo de la sabiduría, siguiendo las directrices establecidas en las enseñanzas del Buda.