Se le dice comprensión o visión armoniosa “mundana”, porque por si sola no conduce a la liberación final del sufrimiento, sin embargo, si entra en el marco adecuado para el desarrollo de la mente y nos ofrece un base sólida para comprometernos en la práctica y el cultivo de una conducta virtuosa y un modo de vida beneficioso para todos los seres.
La comprensión armoniosa mundana abarca el karma y sus resultados. Si bien el karma es profundo y se extiende más allá de la vida presente, las personas pueden aceptar esta ley y actuar en base a su comprensión con objetivos mundanos, como alcanzar una vida satisfactoria y exitosa.
La palabra karma se traduce como “acción”, pero el aspecto clave en el que el Buddha hace énfasis es la volición (cetanā). Son las acciones volitivas las que dotan a los actos de significado ético.
El karma, entendido como acción volitiva, tiene su origen en la mente y luego se materializa a través de los impulsos, disposiciones y propósitos mentales. Estas acciones pueden manifestarse a través de tres canales: pensamiento, acción física o lenguaje verbal, conocidos como las tres puertas de la acción (kammadvāra).
La comprensión del karma no se limita a un conocimiento conceptual, sino que implica un entendimiento más profundo que incluye:
- La diferencia ética entre karma saludable e insano.
- Las principales acciones que caracterizan cada uno de estos aspectos.
- La raíz de origen de la cual surgen estas acciones.
1. La diferencia entre acciones sanas e insanas
Las acciones insanas son censurables y perjudiciales para el desarrollo espiritual, ya que conducen al sufrimiento de uno mismo y de los demás.
Las acciones sanas, en cambio, son elogiadas, beneficiosas para el desarrollo espiritual y generan bienestar tanto para uno mismo como para otros seres.
2. Los diez cursos de acción sanos e insanos
Si bien las acciones pueden ser innumerables, el Buddha las sintetiza en diez cursos de acción sanos e insanos, organizados en tres categorías:
📌 Acción corporal
1. Destruir la vida.
2. Tomar lo que no ha sido dado.
3. Conducta errónea en torno a los placeres sensuales.
📌 Acción verbal
4. Discurso falso.
5. Discurso calumnioso.
6. Discurso dañino.
7. Charla trivial.
📌 Acción mental
8. Codicia.
9. Mala voluntad.
10. Puntos de vista incorrectos.
Las diez acciones sanas representan el opuesto de cada una de las mencionadas anteriormente.
3. La raíz de las acciones sanas e insanas
El origen de las acciones se encuentra en los estados mentales que las producen:
- Toda acción que surge a partir del apego (lobha), la aversión (dosa) y la confusión (moha) es considerada una acción insana.
- Las acciones producidas desde la no-codicia, no-aversión y no-engaño son consideradas saludables.
Sin embargo, las acciones sanas no solo implican la ausencia de estos estados mentales perjudiciales, sino también el desarrollo activo de sus opuestos:
- El no-apego implica renuncia, desapego y generosidad.
- La no-aversión implica amor bondadoso, simpatía y compasión.
- El no-engaño implica sabiduría.
La connotación perjudicial de las acciones insanas no radica únicamente en que surgen de estados mentales dañinos, sino también en que generan maduraciones (vipāka) o frutos (phala).
La complejidad de definir los resultados de cada acción se debe a que no todo acto genera un efecto inmediato. Tanto el tiempo de maduración como el impacto de cada acción dependen enteramente del estado mental subyacente en ese momento. Lo que sí es una certeza es que no existe acción volitiva que quede fuera de su correspondiente retribución.
Creencias erróneas sobre el karma
La comprensión mundana del karma nos aleja de ideas erróneas sobre las acciones y sus efectos:
- La afirmación de que las acciones influyen en nuestro destino, incluso más allá de esta vida, se opone a la visión nihilista, que considera que la existencia termina con la muerte.
- Al fundamentarse en acciones sanas e insanas bajo un principio universal objetivo, se opone a la idea de que la ética es completamente subjetiva y depende únicamente de la opinión de cada individuo.
- Al establecer que las acciones son elegidas, pero condicionadas, se opone a la visión rígida de que las decisiones están sujetas exclusivamente a necesidades y que, por lo tanto, la volición libre es irreal.
- El karma, presentado de esta manera, es una ley universal. No hay una entidad que dicte las consecuencias de cada acción; estas surgen de la propia naturaleza de la acción volitiva.
Aunque nuestra percepción parcial de la realidad puede distorsionar este tema, el Buddha explica que el karma puede comprenderse directamente mediante la experiencia, al avanzar en los estados profundos de meditación.
En ciertos estados elevados, el practicante puede desarrollar lo que se conoce como “el ojo divino” (dibbacakkhu), una capacidad supra-sensorial que permite percibir aspectos de la realidad ocultos al ojo físico.
Esta nota fue elaborada utilizando de referencia las explicaciones de Bhikkhu Boddhi en su libro: “El Noble Óctuple Sendero”.
Las formas son transitorias, el ojo es transitorio (o que el ojo veces transitorio), la nariz es transitoria (lo que la nariz huele es transitoria), la mente …. Viendo esto con clara visión uno debería cultivaser de esta manera; ‘ ESTO NO ES MIO, ESTO NO SOY YO, ESTO NO ES MI SER ‘ _/I\_
☺🙏 Así es.